10 de marzo de 2009

La Trata de Personas. Negocio y sometimiento.

Por María Belén Cano. (diario El Atlantico)

Durante muchos años se persiguió a las prostitutas por escándalo, cuando en realidad el verdadero escándalo es que no se persigue a los proxenetas” (Fiscal federal, Daniel Adler)

Trata de Personas

elebración en cautiverio

Las mujeres son las principales víctimas del reclutamiento, transporte y explotación sexual. En el día mundial de la mujer, miles de argentinas, paraguayas y dominicanas, en su mayoría, estarán cautivas, obligadas a la prostitución en privados de la ciudad y el país. El tercer negocio mundial que más dinero arroja cuenta con la complicidad de funcionarios policiales, judiciales y políticos

Cada año, se denuncia la desaparición de cerca de medio millar de mujeres. Ellas, en su mayoría adolescentes, son reclutadas por las redes de prostitución y convertidas en esclavas sexuales.

Pero el círculo no se cierra fronteras adentro. En privados de Mar del Plata las jóvenes rescatadas son, en un mayor número, paraguayas y dominicanas. El engaño, las amenazas y hasta la violencia se conjugan con la vulnerabilidad de las víctimas, cuya situación socioeconómica las obliga a buscar nuevos horizontes, lejos de sus casas, sus afectos, en lugares cerrados donde las caricias valen dinero.

Los rostros anónimos y lejanos de las jóvenes que trabajan en los prostíbulos tienen nombre e historias. No habrá motivo para celebrar el día mundial de la mujer en las piezas donde viven y trabajan, ofreciendo sexo a amantes de turno. En su mayoría, las jóvenes son víctimas de la trata de personas. Son traídas hasta Mar del Plata mediante engaños –se les ofrece otro trabajo u otras condiciones para la prostitución-, mediante el uso de violencia o amenazas. Los clientes que desfilan a diario son testigos de su situación. Pero hay silencio. El titular de la fiscalía de Trata de Personas, de la Procuración General de la Nación, Marcelo Colombo, denunció protección municipal, judicial y policial. Y el fiscal federal reveló que está pronto a enjuiciarse un efectivo de la Bonaerense, por regentear un prostíbulo.

Hay ganancias extraordinarias e impunidad. Este negocio genera unos 32.000 millones de dólares al año y ya se ubica en el tercer lugar del ranking internacional encabezado por la venta de armas y el comercio de drogas, según datos de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) que, junto con las Naciones Unidas y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), son algunas de las pocas agencias que realizan informes en el país y llevan registros a nivel mundial. Esos mismos escritos indican que 5.000 pesos es la cifra más alta que se pagó en la Argentina por una esclava sexual y 150 pesos el monto menor para explotarlas de por vida.

Prostitutas y Proxenetas

El fiscal federal Daniel Adler fue uno de los organizadores, junto con la defensora del Pueblo, Beatriz Arza, de las jornadas de capacitación sobre trata de personas realizadas en Mar del Plata. En una charla con El Atlántico, el funcionario del Ministerio Público de la Nación en Mar del Plata explicó: “Cuando hablamos de trata de personas estamos hablando de explotación de la persona humana, de la cosificación de la mujer, que es la principal víctima, sobre todo cuando hablamos de trata con fines de explotación sexual”. Si bien Adler consideró que “es difícil generalizar” cuando se habla de protección estatal, policial y judicial, comentó: “Concretamente en Mar del Plata tenemos una causa que en breve se va a enjuiciar a un policía que era dueño de un privado.

Hay prisión preventiva confirmada de la Cámara y vamos a tratar de probar en juicio oral que regenteaba un prostíbulo. Debo decir que durante muchos años se persiguió a las prostitutas por escándalo, cuando en realidad el verdadero escándalo es que no se persigue a los proxenetas, que no tienen la cantidad de causas penales ni contravencionales como las que tienen las personas que viven de la prostitución”. En la ciudad y la zona son unos 14 los detenidos.

El fiscal federal, quien comenzó a trabajar en el tema a principios de la década del 90 cuando ocupaba el cargo de defensor oficial, mencionó que la realidad en Mar del Plata “es muy preocupante porque hay mucha oferta de prostitución con lo cual debemos pensar que hay explotación de personas que viven de la prostitución”.

La ley 26.364, que vino a configurar el delito de trata de personas que no existía en Argentina, fue criticada por obligar a las mujeres a probar que no consintieron su propia explotación. Al respecto, el fiscal federal expresó: “Por lo general las interpretaciones que no parten de considerar la dignidad humana como bien jurídico acentúan la cuestión del consentimiento, cuando en realidad los medios comisivos del delito y el desarrollo de la actividad de los tratantes se vinculan con el aprovechamiento de situaciones de vulnerabilidad: esto es marginalidad cultural, económica, social, de las víctimas que son captadas. Desde este punto de vista, podemos decir que el consentimiento es bastante irrelevante”, subrayó.
A paso lento, o un poco más apresurado como se vio este verano, llegan los allanamientos a los prostíbulos. Sin embargo, las víctimas quedan solas. “Es muy importante la asistencia. La ley lo obliga. Es muy importante la ayuda a estas personas y la posibilidad de construir algún tipo de casa o refugio. ¿Porque a dónde van? Vuelven a ejercer la prostitución. Este es un problema muy concreto”, entendió Adler. En la ciudad no hay contención alguna.

Una ley esperada

“La discusión parlamentaria de 1937 es como si estuviera hecha hoy”, explicó Marcelo Colombo en la jornada realizada en la Facultad de Derecho. “Por ahí cambian las nacionalidades de las personas traídas y explotadas, pero básicamente es el mismo”, dijo. “El cierre de la casa de tolerancia se introduce especialmente en la ley, por iniciativa del diputado Serrey, que señala que más importante inclusive que la salud de las personas, es la cuestión de explotación sexual a la cual estaban siendo sometidas muchísimas mujeres en aquella oportunidad”, relató el fiscal de la Procuración General de la Nación, a cargo de la Unidad Fiscal de Asistencia en Secuestros Extorsivos y Trata de Personas.

La ley 26.364 vino a configurar el delito de trata de personas que no existía en Argentina. “Antes de la aparición de esta norma, los operadores judiciales teníamos para operar con la cuestión de la trata, los delitos que establecían la situación de explotación del ser humano”, determinó. “De acuerdo a cómo está configurado el proceso de trata –continuó-, se establecía criminalización casi exclusivamente a la última etapa del proceso, es decir, cuando el ser humano era reducido a esclavitud, servidumbre o condición análoga, de acuerdo al artículo 140 del Código Penal, o cuando directamente era explotado en término de comercializarse actividad sexual”. Sin embargo, no existía una mirada de la trata de persona como un proceso. “Había algunas normas que penalizaban el transporte de personas a los confines de ser explotadas sexualmente, cuando era de un país a otro. Pero no había nada parecido para la trata interna”. “En algunos juzgados de la Ciudad de Buenos Aires –continuó- se echaba mano de la ley de profilaxis antivenérea y de certificado prenupcial, la 12.331, cuanto castigaba la explotación con fines de lucro de casas de tolerancia”, comparó el agente fiscal. “Con esta nueva ley estamos muchísimo mejor de lo que estábamos antes. Tenemos una ley que ha decidido castigar todas las etapas previas del proceso de explotación del ser humano”, resaltó Colombo.

1 comentario:

Anonymous dijo...

Muy bueno el artículo